LA PUEBLA DE CAZALLA. EL MORISCO BLOG. FORO DE LA PUEBLA DE CAZALLA

La Casilla del Guarda es una vivienda rural que está situada en la margen derecha de la carretera que va de Raspapelos al Fontanar en torno a un 1 km del arranque de la misma. Ese nombre tan peculiar por la que se la conoce quizás le viene de que fue adonde tradicionalmente tenía su habitación el encargado o guarda que, cuando aquello era un mero y angosto camino rural sin asfaltar, tenía allí la vecina finca de San Pedro o de Las “Boeguillas” (otros dicen que el cortijo de los Frailes) a cuya propiedad parece que pertenecía según las informaciones, no sabemos si muy fidedignas, que hemos podido recabar.

Sea como fuere, hasta hace unos años se había mantenido regularmente ocupada y no era difícil percibir humo en su chimenea, diversos vehículos y aperos en sus alrededores y otros muchos signos incontestables de que en torno a la misma había actividad humana, por este motivo, hará un par de años que nos causó sorpresa, y bastante decepción, contemplar cómo seguramente había sido abandonada y en poco espacio de tiempo la ruina estaba acabando con uno de los últimos vestigios de un hábitat rural tradicional en nuestro campo.

En efecto, los cambios socioeconómicos que Andalucía y España empezaron a experimentar desde mediados de los 50 en adelante, tuvieron, entre otras consecuencias, el traslado de grandes masas de población del campo a las ciudades y la pérdida progresiva de la importancia económica que la agricultura había tenido hasta entonces como empleadora de mano de obra, con el consecuente abandono de muchos ranchos y cortijos. En nuestro término y alrededores, desde más o menos ese periodo y hasta prácticamente hace unos años, se fueron abandonando a la incuria y al pillaje, y muy pronto arruinando como no podía ser menos, fincas antes florecientes como por ejemplo la Adelfa, Birrete, el Cortijillo, las Monjas, la Gerena, los Frailes, la Alcachofa, los Galvanes, Casablanca, Cruzate, el Vínculo, la Esperanza, la Casilla “Jaro”, el Verdial, y una relación innumerable de casillas, ranchos y otras fincas menores.

Estado de ruina en que nos encontramos la Casilla del Guarda

Pero he aquí que hace unas cuantas semanas pasamos de nuevo por el lugar y esta vez la sopresa fue agradable, vimos como había albañiles que estaban reconstruyéndolo conforme a unos patrones que respetaban en grado sumo el aire tradicional del caserío, la distribución, la planta única y hasta las proporciones del edificio original, algo insólito en nuestros tiempos donde lo frecuente es encontrarse con una construcción tipo chalé donde la edificación es un volumen cúbico dotado con una cubierta de tejas rojas.

Según se nos informó, el propietario actual de la finca es el conocido empresario y emprendedor moronense D. Sebastián Castillo, que planea destinarla a la explotación cinegética, y a quien desde aquí felicitamos por el buen gusto de la obra realizada aunque eso sí, quizás la valla exterior con que piensa rodearla, probablemente obligado tributo a pagar por la seguridad del edificio, debido al material que va a ser empleado puede ofrecer un resultado dudoso que tal vez empañe un tanto el buen hacer y acierto de la concepción general de la reforma.

A continuación os ofrecemos un álbum de fotos donde contrastamos la situación de ruina en que encontramos en su momento la Casilla del Guarda y cómo se encuentra en la actualidad después de su rehabilitación, a la que insistimos en considerar todo un acierto en el contexto donde nos hallamos, y que podría servir de modelo y ejemplo a seguir para todos aquellos propietarios que se planteen efectuar algo similar. Hoy, afortunadamente toca felicitarnos porque podamos conservar y seguir destinando a fines que reporten beneficios sociales y económicos, unos elementos de nuestro patrimonio cultural tradicional como son las formas y usos constructivos de la vivienda rural tradicional.