Mar 19 2011
MARTÍN FERNÁNDEZ SALDIANO: UN VECINO DE LA PUEBLA DE CAZALLA PENITENCIADO POR LA INQUISICIÓN
En la relación de personas que salieron en el Auto de Fe que se celebró en la plaza de San Francisco de Sevilla, en el domingo 24 de septiembre de 1.559, presidiendo en los negocios del Santo Oficio el muy ilustre y reverendísimo señor D. Juan González, obispo de Tarazona, y siendo inquisidores los muy magníficos señores licenciados Andrés Gasco y Miguel del Carpio, y Juan de Ovando, provisor (Simancas, Estado 137, f. 21)
Procesión de penitenciados por la Inquisición
Estaba incluido nuestro paisano Martín Fernández Saldiano que había sido acusado y condenado por blasfemia, un delito poco importante para el Santo Oficio más interesado en perseguir luteranos, judaizantes, moriscos y adoradores del demonio con todos los cuales sí que se mostraba implacable condenándolos, en las más de las ocasiones, a morir en la hoguera.
Por este motivo nuestro paisano Martín, un simple blasfemo que probablemente había tenido la mala suerte de haber sido denunciado por algún vecino envidioso, solo recibió una pena relativamente suave en aquellas circunstancias: soga, mordaza, vela y azotes. Una manera frecuente de llevar a cabo este castigo era desnudar al reo de cintura para arriba y con correas de cuero proceder a la flagelación del mismo propinándole una cantidad de azotes que solía oscilar entre los 100 y los 200. La mordaza en la boca simbolizaba su delito/pecado cometido con la lengua y la soga al cuello y la vela su condición de penitente.
El tribunal de la Inquisición, llamado también del Santo Oficio, fue una institución que en España fue creada en 1.478 por los Reyes Católicos. Desarrolló su función de perseguir la herejía y preservar la unidad católica de España hasta que fue abolida definitivamente en 1.834 con la consolidación del triunfo de las ideas liberales. Lo que hacía particularmente odiosa su labor, a parte de los terribles castigos infligidos a sus víctimas, era su procedimiento de actuación: detenía a las personas confinándolas en cárceles secretas, no se les informaba del motivo de la acusación ni de quienes habían sido sus delatores, cada detenido tenía que demostrar su inocencia aunque no supiera cuál era el delito concreto del que se le acusaba y por fin, que la tortura era el medio habitual de obtener la confesión.
Iglesia de la Magdalena antigua sede de la Inquisición de Sevilla
Tan odiosa se hizo la actuación de este tribunal, que ha quedado en el lenguaje popular una expresión que refleja perfectamente este sentimiento aunque aquellos que en la actualidad hacen uso de la misma no acierten a sospechar su origen. En efecto, cuando en La Puebla hablamos de que alguien ha hecho una inquisición se está diciendo que ese alguien ha cometido una gran falta o injusticia o estropeado en grado sumo una cosa, rememorando de esta forma los ecos de aquellos oscuros días.
Por último os señalamos en el mapa la localización de una besana de nuestro término, que se extiende junto a la carretera que va a la presa, en una zona situada a su izquierda y como a unos 4 kms de su arranque, muy cercana a las lindes del cortijo del Acebuche. Dicha besana recibe el nombre de La Inquisición aunque lamentablemente no tenemos noticia que nos aclare el por qué de esta denominación.
AA_Wiki Puebla de Cazalla
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Reunión de Cante Jondo de la Puebla de Cazalla. Blog
En el fondo a estos personajes de la Inquisición les importaban muy poco si ofendian o no a la Iglesia, creo que el fondo como siempre, sería de tipo económico y de aviso a quién osara poner en duda sus postulados. Sería como demostrarles al mundo su poder y les sirviera de escarmientos a posibles pensadores.
Aún quedan personas, que si pudieran actuarían igual, y no solamente en la religión católica, también en otras religiones o partidos políticos, los “que piesan por sí mismos” son un peligro para muchas organizaciones.
Por eso hay que fomentar entre nuestros jóvenes el espíritu crítico que nos harán más libres.
En primer lugar presentarme: soy morisco de nacimiento y aunque mis padres emigraron, allí se quedó el resto de familiares. Es importante saber de donde procedemos por que la vida a da muchas vueltas.
En mi juventud pensaba, como muchos que, en el oscurantismo religioso de la Edad Media y del Renacimiento, tuvo mucho progatonismo, quizás demasiado, la Iglesia Católica. Precisamente la Santa Inquisición fue la institución que más hiciera por ello, por sus acciones y por cómo impartía su justicia divina.
Con el tiempo, mi formación sobre la historia del conjunto de países de esa época me hizo ver que no siempre todo es, lo que se cuenta, ni como te lo cuentan.
Efectivamente, y con nuestra mentalidad de hoy no podemos admitir tales tribunales de justicia, pero si lo situamos en las circunstancias de su tiempo, llegaremos a otras conclusiones.
Me explicaré, cuántos de nosotros conoce la virulencia de las guerras de religión cristiana de centro-europa entre católicos, luteranos calvinistas y otros, cuantas persecuciones de infieles, de brujas y demonios realizadas por el populacho, cuanta justicia divina se impartió por las huestes de uno y otro bando.
La Inquisición española solo debe ser juzgada en su paréntesis histórico, y no perder de vista el marco en la que surgió en esos oscuros años de una sociedad gobernada con mano de hierro por la monarquía, la nobleza y el clero.
Saludos
Pedro, vamos a ver, el cuadrito es el escudo de la Inquisición, en él hay una cruz que es el ssímbolo de la fe católica, una espada que representa lo que le espera al hereje contumaz y por fin, un ramito de olivo a la izquierda que simboliza la paz para el hereje que se reconcilia con la Iglesia. Espero haber dado respuesta a tu pregunta.
Y el cuadrito con la cruz y la espada qué significa o es?
hemos de dar las ¡¡¡gracias!!! al inquisidor general, el dominico,
Tomás de Torquemada y a los Reyes….Católicos?.
No quería ser mal educado, y creo que me he excedido en mi anterior comentario. Si a alguien le molesta, lo retiro, pero el tema éste de la Inquisición me pone nervioso, por lo malvados que llegaban a ser esta gente que, teóricamente tenían estudios, predicaban la doctrina de Cristo y luego hacían todo lo contrario, y juzgaban y mataban a cualquiera simplemente por decir una palabrota.
Menos mal, que la Iglesia ha cambiado mucho.
Me cago en la p*** madre de todos los que componían el Santo Oficio, el Tribunal de la Inquisición y todo lo que se le parezca a tan infame Institución.
Cuando pienso en la inquisición y además que es santa, se me revuelven las tripas. Yo cuando estaba en el Seminario en Hinojosa del Duque con el padre Jaime de Prior, no había oído nunca esa palabra y mucho menos que estos energúmenos fueran religiosos, curas, etc. Siempre me enseñaron el amor para con el prójimo, que es al fin y al cabo las enseñanzas de Jesucristo, pero estos fantasmas de gentuza que se irrogaban un poder para así poder mangonear a sus gustos y maneras, no puedo ni creérmelo, aunque sé que es verdad. Yo soy muy crítico con la iglesia y si es del Papa, mejor aún. Yo todavía estoy viendo las imágenes de Juan Pablo II, cuando fue a visitar a Nicaragua y al ministro que era cura de rodillas y él con el dedo tieso como echándole una bronca, aquello me impactó. En vez de haberle ayudado a que se levantara y haberle dado un abrazo, hizo todo lo contrario y ahí se le vió el plumero al santo Padre, que de santo no tenía nada. Pues, menos mal que el publo tomó nota de lo que vió y fue muy abucheado después. Con la guerra de Irak, me ocurre igual. En vez de echarle una bronca a Aznar por haber dicho las mentiras que dijo, él fue a su bola y aquí no pasó nada. Lo mismo e igual lo debería haberle hecho a Bush. ¿Y qué hubiera pasado si hubiera hecho lo que tenía tal como digo hacer? El mundo hubiera ganado un lider cristiano y además lo hubieran visto muchos millones de personas, las cuales se habrían dado cuenta de que estában ante una persona a imagen de Jesucristo. Pero no, él no hizo nada de eso, se fotografió con ellos y sonrisas por aquí y sonrisas por allá. Y para colmo lo quieren hacer santo. Y siguiendo con la santa inquisición, me figuro a muchas madres ya viejas que las tildaban de brujas por decirle a una vecina o a varias que tomasen esto o aquello para curar y encima se chivaban a la inquisición de que eran unas brujas. Después venían los suplicios, los tormentos las torturas, y esos nombres tan horribles que les infligían a estas pobres personas que caían en sus redes y éstas sí que no se recuperaban nunca más. También, ¡como no!, habrían algunos curas que desearían a algunas mujeres hermosas y como no tragaban, pues eso. Y la pregunta que se me viene a la cabeza es: ¿Y todo esto lo hacían por el amor de Dios? Menos mal que hoy día estas cosas no ocurren, pero si fueran por algunos y que además se ven cada día en las televisiones que se las dan de católicos y cristianos, ¡madre mía!